martes, 14 de diciembre de 2010

Según Petrona C. de Gandulfo

SaignantBlogspotCom

viernes, 10 de diciembre de 2010

The Final Cut

"Thought I oughta bare my naked feelings,
Thought I oughta tear the curtain down.
I held the blade in trembling hands
Prepared to make it but just then the phone rang
I never had the nerve to make the final cut. "

Nobody's home.

Yo creo que esto se convirtió (o lo fue desde el principio) en un agujero negro. Un lugar, un píxel, un espacio, una bitácora virtual en la que yo vomitaba, como si se tratara de una enfermedad, ideas, vueltas, repeticiones de la peor puñalada que me dieron, quizás desde que nací, y eventualmente los borbotones ocasionales de una historia inventada. No tenía la idea, en un principio, de abarrotar a la gente (¿lectores? en el caso de que existan) con un misil de frustraciones que yo misma construí, sin embargo fue inevitable, fue inevitable hacerlo público de la forma más implícita posible, pintado en un telón casi casi casi imperceptible. Y es que soy muy cerrada, muy áspera, muy quisquillosa, con motivos me imagino, y me parece que ser así hizo que un dolorcito hiciera metástasis del corazón hasta la cabeza. Pensaba en esto más de lo necesario, más de lo que estaba planificado. Fue un camino de tropiezos, golpes, llanto esporádico, numbness y un florecimiento final en silencio. Exacto. A veces pienso en que estoy equivocada, y esto fue como una inyección. La parte más complicada es cuando la aguja rompe la piel, la adrenalina sube y sube, hasta que solamente se trata de esperar a que salga, y se vuelve un cosquillero tímido en el pecho. Se terminó, y gracias a vos.

Goodbye, all you people. There's nothing you can say to make me change my mind.
Goodbye.

martes, 7 de diciembre de 2010

Guía Básica para la Tortura I

G u í a  B á s i c a para la T o r t u r a.
I. A s f i x i a n d o  el  t i e m p o.

Recientemente mi vida se basa en sintetizar un poco de ADN con arsénico, dormir una siesta, despertarme a la noche y matar el tiempo. El tiempo se arrodilla, asustado, con lágrimas en los ojos, suplicando a mis pies como si yo todavía tuviese corazón, apelando a su familia, a sus ganas de vivir. El desgraciado me dice que no se quiere morir, ¿y a mi qué mierda me importa lo que este quiera? Todas las noches vomitando penas, absolutamente todas las noches, ya no puedo vivir, no es que no quiero, no puedo. Y además, no quiero. Este viene con que tiene ganas de vivir. ¡Mirá vos qué bien! ¿Me darías algunas? Porque al kiosquero no le quedaba en stock.
Me mira con desdén, y claro, si no entiende mucho de lo que pasa. Realmente me dio un poquito de lástima, pero no pude evitar que me aburriera y asfixiarlo con las manos.
Lo primero que se siente cuando te asfixian con las manos es una desesperación que va aumentando de la siguiente manera:
La cantidad de desesperación presente en el cuerpo es inversamente proporcional a la cantidad de aire en el mismo.
Instintivamente la primera reacción es quitar bruscamente al verdugo, pero esto resulta ligeramente difícil si la persona es más pesada que uno. La garganta empieza a arder, imagino que esto es porque la sangre se empieza a volver alcalina, pero qué sé yo, el pH es mayor a 7 ah re cualquiera. El pecho también arde, y seguramente se puede intentar mover la cabeza para los costados, intentando sin éxito escapar de las manos que actúan como peaje para el aire. Mientras uno empieza a salivar con intensidad, los brazos y las piernas empiezan a cosquillear, eso, según lo que leí/escuché ayer en Criminal Minds, es porque el corazón empieza a latir más lento y deja de enviar sangre a las extremidades. Si uno estuviese haciendo esto por cuenta propia, se desmayaría en este mismo momento en el que las extremidades se desactivan y volvería a respirar, porque el cuerpo no es idiota y sabe cómo evitar suicidios pelotudos. Como al tiempo esto no le estaba pasando, se fue desvaneciendo sistemáticamente hasta que el cerebro dejó de funcionar, que fue a los cuatro minutos, más o menos.
Esto pudo haber sido más tortuoso, claro, si el proceso hubiese sido detenido cuando se desvanecen los brazos y las piernas, y luego reanudado, porque si bien no se obtiene tanto aire como para respirar con tranquilidad, uno no se muere, usa cada partícula de aire para seguir viviendo. Menos yo, que sintetizo mi ADN con arsénico.

lunes, 6 de diciembre de 2010

23

Seguramente me lo había olvidado, capaz que no, capaz solamente estaba guardado como una ropa vieja o como un recuerdo hostil, capaz solamente me lo imaginé y estaba dentro de esa manada de bestias que me inventé. Capaz, no sé, estaba muy adormecida como para acordarme.
Capaz en ese guiso de principios de humo de cigarrillo comida casera cables rotos piel lastimada vómito de nervios bilis sangrado nasal te voy a extrañar tanto que se me estalla la carótida, ¡siempre recordándotelo! La lactasa, lactosa, cuajada, cuajar, bicarbonato, cristales de nada, ¡disparan! Siempre se escuchan disparos acá en Ramos, ¿te diste cuenta? No, seguramente no, porque no vivís en Ramos, ¿en tu barrio se escuchan? ¿se sale a la noche? ¿vivís en Suiza? ¿hay ley marcial? ¿nos matarían si se les diera la gana? ¿si se lo pidiera? ¿me ahorrarías tantas golpizas? Realmente te lo estoy pidiendo, no miento, no exagero, no fabulo, no me imagino nada, realmente soñaba con levantarme la remera y mostrarte el reino de moléculas piel sangre y cicatrices, ¿por qué se fueron? Estaban, te juro que estaban, el calor que hacía era insoportable, ¿por qué me presté para eso? El aire se espesó, no respiro. Le rompí un diente, porque yo no respiraba, me estaba asfixiando.

No miento.
No exagero.
No fabulo.
No me imagino nada.

22

Graznaba en la penumbra, que es ese intervalo entre la luz y la oscuridad (¿obscuridad? no, mis queridos, OSCURO), te voy a atornillar. Guardaba un bombardeo en los bolsillos, cuando sonreía se me escapaban las ratas del estómago.
Ladraba entre tus huellas, olía la bilis de tu cabeza entre los caminos de tu ausencia.
¿Cómo puede ser que te alboroten mis placeres?
¿Acaso me estaba muriendo en tu regazo? No quiero, no me quiero morir todavía, quizás eso se puede ver en la materia fecal y en las lágrimas de lluvia ácida. Antes se acostumbraba arrancar uñas, qué sé yo... estas torturas están cada vez más pelotudas, menos concisas, menos útiles, yo ya no te puedo dar nada, no quiero, no puedo, no tengo, no tengo qué, no me sale. Me estoy ahogando, deberías parar, deberías succionar el poco de vida que me queda: Solamente cuando uno toca fondo puede subir de nuevo.
¿Por qué siento este dolor? No es mio, lo robé, y ahora no lo quiero, ya me ahogué en él y no lo puedo sentir más, me está matando.

Solamente para vos, me queda este cariño, que está casi inútil. ¿Lo querrías?

L&0UVE

El suicidio de Miranda no tuvo nada que ver contigo.
Eran las voces, voces que le decían que lo hiciera...
Voices that became lowder when she was raped.

don't send me to the path of nevermore.

jueves, 2 de diciembre de 2010

21

Me encantaría que se rompieran los relojes.
Y guardar los guantes negros en los cajones de mi armario.
Aspirar el plástico de las paredes, quemar sonidos blancos.
Envolver el alma.
Desnudarme y quedar perdida.
Ser una partícula.
Rodar desde el hueco en tu pecho.
Hasta tu ombligo.
Respirar las mariposas desganadas que se esconden en tus rincones.
Alzarme sola.
Tomarte de ambas manos.
¿Se me está revolviendo el corazón?
Seguramente.
Pensá un segundo en por qué me ruborizo tan seguido.
Y alegrate: A alguien se le desborda el alma de vos.
Me encantaría dormirme.
Olvidarme.
Tenerte así de cerca.
Estás tan cerca que tu perfume me revienta la razón.
En mis sueños puedo oler.
Me encantaría que me vieras. Me encantaría.

Me moriré de ganas de decirte que te voy a echar de menos.

miércoles, 1 de diciembre de 2010

20

Casei =/= Caseína
Café =/= Cafeína
Teobromina = Juli